Para comprimir nuestras imágenes o fotos solemos recurrir a aplicaciones como XnView o Resizer, sobre todo cuando dichas imágenes se van a utilizar para contenido web y necesitamos rebajar el tamaño de archivo. Pero si quieres hacer un reducción del tamaño, también lo puedes hacer a través del navegador Chrome. Y es que a través de Chrome Lab nos llega Squoosh, un editor gráfico gratuito de Google, que funciona en el navegador.
No solo es compatible con Chrome. También funciona con otros navegadores, incluidos los del móvil
Squoosh es un editor gráfico online muy sencillo de usar, y bastante básico. Pero tiene una característica importante: es extremadamente rápido. De hecho parece una aplicación ejecutada de forma local. Nos va a permitir comprimir imágenes, reducirlas de tamaño o cambiarlas de formato.
Accedes a Squoosh a través de su página web, desde cualquier navegador en cualquier dispositivo. Puedes usar las imágenes de ejemplo que ya están precargadas, para probarlo, o subir una de tu ordenador o móvil. Squoosh tiene dos funciones principales: comprimir una imagen, y cambiarla de tamaño. Todas las herramientas están en la zona derecha de la pantalla.
Dispones de varios algoritmos de compresión como MozJPG, OptiPNG, etc., para comprimir la foto sin perder mucha calidad. Lo mejor de todo es que puedes ver el cambio de la imagen en tiempo real, deslizando una barra por la pantalla. Así puedes comprobar si se pierde mucha calidad al comprimir:
También es posible ajustar la calidad de la compresión, y la paleta de colores. Cuando terminas, solo queda descargar la imagen modificada. Como hemos comentado, es una herramienta sencilla pero muy eficiente y rápida. Y, sobre todo, muy práctica, al poder comprobar los cambios del algoritmo de compresión, en tiempo real. ¡Muy espectacular!
WebP, JPEG o PNG son algunos de los formatos que podemos elegir
Entre sus proyectos, que puedes consultar en Github (o descargar su código fuente), hay un editor de texto para Chrome y ChromeOS, un filtro que convierte una web en un cuadro artístico, herramientas de análisis, ayuda a la programación, y mucho más. Un buen ejemplo de las cada vez más versátiles aplicaciones que nos proporciona la nube de Google.
