
Hay imágenes que definen una era. Y la foto de un Xiaomi SU7 Ultra circulando por la sacrosanta fábrica de Ferrari en Maranello es una de ellas. No es una anécdota. Es un terremoto. Es la constatación de que el mundo del automóvil se ha puesto del revés. La marca más legendaria, más arrogante y más icónica del planeta, pillada in fraganti estudiando, analizando, espiando al que, hasta hace un año, era un simple fabricante de móviles.
Si esto no es la humillación definitiva para la vieja guardia europea, que baje Dios y lo vea. En Gurú Tecno, vamos a analizar por qué el maestro se ha visto obligado a arrodillarse para copiar los deberes del alumno aventajado.
El ‘pecado original’: cuando llamaban al SU7 una «Copia China»
Recordemos el chiste. Cuando se presentó el Xiaomi SU7, las redes se llenaron de «expertos» que lo despacharon con desdén: «es una copia china del Porsche Taycan«. Y ahora, resulta que la marca más elitista del mundo, Ferrari, cree que puede aprender (y mucho) de esa supuesta «copia». La ironía es tan deliciosa que casi se puede saborear.
No es la primera vez que pasa. Hace poco supimos que Hyundai también había comprado varias unidades del SU7 Max para «investigación». Pero que lo haga Ferrari, en su propia casa, mientras preparan su primer coche 100% eléctrico, es de otro nivel.
¿Por qué le interesa a Ferrari un Xiaomi? La brutalidad de los números
La respuesta es simple: porque el Xiaomi SU7 Ultra es una bestia de la ingeniería que les está pintando la cara en su propio terreno.
- Potencia: 1.526 caballos de sus dos motores eléctricos.
- Aceleración: Un 0 a 100 km/h en un demencial 1,98 segundos.
- El ‘zasca’ de Nürburgring: Y aquí viene lo que más duele en Maranello. Un prototipo basado en el SU7 Ultra batió el récord del circuito de Nürburgring, superando a bestias como el propio Ferrari SF90.
Ferrari se ha dado cuenta de que, mientras ellos seguían puliendo sus gloriosos V12, una empresa de móviles ha llegado y ha creado un sedán eléctrico que, en prestaciones puras, puede humillar a sus superdeportivos. Y eso, para una marca cuyo único argumento es ser la más rápida, es una crisis existencial.
El verdadero motivo: el pánico al primer Ferrari eléctrico
La coincidencia de la llegada del SU7 Ultra a Maranello con las pruebas del que será el primer Ferrari 100% eléctrico no es casualidad. Los italianos están finalizando el desarrollo de su coche más importante y arriesgado, y necesitan saber a qué se enfrentan. Necesitan entender cómo ha conseguido Xiaomi un rendimiento tan brutal a un precio que, comparado con el de un Ferrari, es un chiste.

Están comparando ambos vehículos, analizando la gestión de la batería, la entrega de potencia y la eficiencia del tren motriz chino. Están estudiando al enemigo para intentar no hacer el ridículo cuando lancen su propio eléctrico.
Conclusión Gurú Tecno: el mundo se ha puesto patas arriba
La imagen de un Xiaomi SU7 en el corazón de Ferrari es mucho más que una simple anécdota. Es el símbolo del cambio de poder en la industria del automóvil. Es la prueba de que la innovación, la velocidad y la audacia ya no residen exclusivamente en los valles de Módena o Stuttgart.
La «copia china» se ha convertido en el maestro. Y las leyendas europeas, por primera vez en un siglo, se ven obligadas a estudiar y a aprender de los que, hasta ayer, consideraban inferiores.
El mundo del motor ha cambiado para siempre. Y esta foto es la prueba. La pregunta ya no es si los coches chinos van a competir con los europeos. La pregunta es si los europeos serán capaces de competir con los chinos. Y viendo a Ferrari espiando a Xiaomi, la respuesta, sinceramente, da un poco de miedo.
¿Crees que Ferrari hace bien en estudiar al Xiaomi SU7? ¡Te leemos en los comentarios! Y no te olvides de seguir a Gurú Tecno en YouTube, Instagram y Facebook.