
Apple vuelve a tropezar con la misma piedra. Tras el fracaso del iPhone mini y el desinterés por el iPhone Plus, ahora llega el turno del iPhone Air, un terminal que enamora a primera vista… pero no a la hora de pasar por caja.
El prestigioso analista Ming-Chi Kuo confirma que Apple ha ordenado un recorte del 80% en la producción del iPhone Air, y algunos componentes dejarán incluso de fabricarse antes de final de año. Un auténtico terremoto dentro de la cadena de suministro de Cupertino.
El golpe: Apple frena en seco el iPhone Air
Según Kuo, Apple reducirá drásticamente la capacidad de producción entre ahora y el primer trimestre de 2026, anticipando que lo ya fabricado bastará para cubrir todo el ciclo comercial.
Es una decisión que recuerda a la historia del iPhone 12 mini, aquel intento de “compacto premium” que nunca cuajó. El Air buscaba ser la alternativa ligera y ultrafina frente a los mastodontes Pro y Pro Max, pero el público ha preferido mayor autonomía y mejores cámaras.
Dos mundos opuestos: fracaso en occidente, éxito en China
Mientras en España, Europa y EE. UU. los iPhone Air siguen cogiendo polvo en las estanterías de las Apple Store, en China se ha convertido en un fenómeno. El lanzamiento se retrasó un mes por temas de regulación eSIM, y cuando llegó, el stock voló en minutos. Tim Cook incluso visitó tiendas en Pekín y Shanghái ante el entusiasmo del público.

En cambio, en Occidente el panorama es deprimente: desde el 28 de septiembre no se ha agotado ni una sola vez. En contraste, el iPhone 17 Pro Max desaparece del inventario en cuestión de minutos.
¿Por qué no termina de arrancar el iPhone Air?
La explicación parece clara: el iPhone 17 y el 17 Pro ya cubren las necesidades de casi todo el público. El Air se queda sin espacio, sin identidad y sin argumentos más allá de su delgadez. Y para colmo, sacrifica batería y cámaras para mantener ese cuerpo ultrafino. Un error de libro. Como señala Kuo, “el mercado no quiere teléfonos más finos, quiere teléfonos más completos”.
El entrenamiento para el iPhone plegable
Aunque el Air sea un fracaso comercial, Apple ya ha conseguido lo que buscaba: una prueba de ingeniería real para su futuro iPhone plegable, previsto para 2026. Si juntas dos iPhone Air con una bisagra en medio, tienes el concepto base de ese dispositivo. El Air, por tanto, podría pasar a la historia no por lo que vendió, sino por lo que permitió construir.

Conclusión
Apple lleva años buscando la cuadratura del círculo: cómo ampliar la gama sin pisarse a sí misma. Pero la historia vuelve a repetirse. Lo intentó con el iPhone mini, apostando por la nostalgia y el formato compacto. Fracasó. Probó con el iPhone Plus, una versión grande y descafeinada del Pro Max. Tampoco. Y ahora el iPhone Air, ese prodigio de ingeniería ultrafina, está firmando el mismo destino.
La lección es brutal pero clara: el público ya no se deja impresionar por el grosor de un teléfono. Lo que mueve la decisión de compra es autonomía, potencia y cámaras. Tres pilares que Apple ha reservado para los modelos Pro, dejando al Air en tierra de nadie.
El consumidor actual —más informado, más exigente y con un móvil de gama alta ya en el bolsillo— no busca un “experimento elegante”. Quiere una bestia fiable que le dure años. Y ahí el Air no compite; simplemente no tiene sentido.
Apple parece atrapada entre dos mundos: el de los Pro, que venden por deseo, y el de los básicos, que venden por precio. En medio, solo queda un limbo de terminales que ni seducen ni convencen.
Ni mini, ni Plus, ni Air. El público está votando con la cartera, y el mensaje es demoledor:
“No nos deis versiones intermedias, dadnos el mejor iPhone posible o el más barato posible.”
En el fondo, el iPhone Air es una víctima de su tiempo. Nació para enamorar visualmente, pero el mercado actual no compra emociones: compra batería, cámara y longevidad. Si el Air ha servido para algo, es para recordarle a Apple que el diseño espectacular ya no basta. La era del “wow” visual se ha acabado; empieza la era del “me dura todo el día”.
Y quizás, en ese aprendizaje, esté escondido el verdadero legado del Air: ser el último error antes del próximo gran salto, ese iPhone plegable que ya asoma en el horizonte de 2026. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.