
Jack Dorsey, el enigmático y barbudo cofundador de Twitter, ha vuelto a la carga. Y esta vez, su objetivo no es crear otra red social, sino atacar directamente a uno de los pilares de nuestro mundo digital: la mensajería instantánea. Dorsey acaba de lanzar BitChat, una nueva aplicación que no es solo «otro WhatsApp más», sino un concepto radicalmente diferente que busca ser la herramienta definitiva para la comunicación privada, segura, descentralizada y… que funciona sin conexión a internet.
Sí, has leído bien. En un mundo donde parece que sin datos o Wi-Fi estamos incomunicados, Dorsey se ha sacado de la manga una app que funciona a través de redes de malla de Bluetooth, permitiendo enviar mensajes sin depender de ninguna compañía telefónica ni de ninguna red centralizada. Es, en esencia, el «walkie-talkie» del siglo XXI.
Si estás harto de que Meta (la dueña de WhatsApp) sepa hasta cuándo vas al baño, o si simplemente te flipa la idea de poder comunicarte en medio de un festival o un apagón, sigue leyendo. Porque BitChat es una de las ideas más interesantes y ‘punks’ que hemos visto en mucho tiempo.
Así funciona la ‘magia’ de BitChat: una red de malla que teje conversaciones sin internet
El concepto detrás de BitChat es tan ingenioso como complejo. En lugar de enviar tus mensajes a un servidor central que luego los redirige al destinatario, la app utiliza la tecnología Bluetooth de bajo consumo (BLE) para crear una red de malla (mesh network) entre los propios usuarios.
- ¿Cómo funciona? Cuando envías un mensaje, tu móvil no busca una torre de telefonía. Busca otros dispositivos cercanos que también tengan BitChat instalado y utiliza su conexión Bluetooth para ir «saltando» de un móvil a otro, como si fueran repetidores, hasta encontrar el camino más corto para llegar al destinatario.
- La ventaja: Esto crea una red de comunicación descentralizada, resistente a la censura y que, como hemos dicho, no necesita internet para funcionar. Es la herramienta perfecta para comunicaciones locales en zonas sin cobertura o en situaciones donde las redes tradicionales puedan estar caídas o vigiladas (como una manifestación).
Privacidad y anonimato llevados al extremo (adiós, cuenta de usuario)
Fiel a su obsesión por la descentralización y la privacidad (que ya demostró con su implicación en la red social Bluesky), Dorsey ha diseñado BitChat para ser un búnker digital:
- Sin cuentas, sin datos: La aplicación no te pide que crees una cuenta, ni que des tu número de teléfono o tu correo electrónico. Puedes usarla de forma completamente anónima.
- Mensajes cifrados y efímeros: Todas las comunicaciones están cifradas. Los mensajes se almacenan únicamente en tu dispositivo (no en una nube) y, según se informa, se eliminan automáticamente cuando sales de la aplicación, sin dejar rastro.
- Nombres de usuario opcionales: Si quieres, puedes usar un nombre de usuario, que sirve principalmente para que tus contactos te puedan «mencionar» o alertar dentro de una sala de chat.
Es lo más parecido a tener una conversación secreta en un callejón oscuro, susurrándose al oído, pero desde la comodidad y la seguridad de tu móvil. Privacidad en estado puro.
La cruda realidad: sus limitaciones y el eterno problema de la adopción
La idea es brillante, sí. Pero ahora viene la bofetada de realidad que en Gurú Tecno siempre nos gusta dar. Esta tecnología tiene una limitación física fundamental: el alcance del Bluetooth.
Para que la red de malla funcione y tu mensaje pueda «saltar» lejos, necesitas una alta densidad de usuarios con la app instalada y activa en un área geográfica concreta.
- Escenario ideal: Un festival de música, un campus universitario, una plaza llena de gente durante una protesta, un vagón de metro abarrotado. En estos casos, BitChat podría funcionar de maravilla.
- Escenario realista: Para hablar con tu amigo que vive en otro barrio, o con tu primo del pueblo, olvídate. Si no hay una cadena ininterrumpida de usuarios entre vosotros, vuestros mensajes se perderán en el éter.
Y esto nos lleva al problema de siempre: la adopción. Por muy buena que sea una app de mensajería, no sirve de nada si tus amigos no la usan. Es el mismo muro contra el que se estrella la segurísima Signal, pero multiplicado por mil.
Disponibilidad: una beta exclusiva para 10.000 afortunados (y solo en Apple)
De momento, BitChat es un club muy exclusivo. Dorsey solo ha dado acceso a una primera beta limitada a 10.000 usuarios, y, por ahora, solo está disponible para iOS y macOS.
Conclusión Gurú Tecno: un ‘walkie-talkie’ anarquista para el siglo XXI, no el nuevo WhatsApp
Seamos claros: BitChat no va a matar a WhatsApp. No está diseñado para eso. Es una herramienta de nicho, una genialidad conceptual para un caso de uso muy específico: la comunicación hiper-local, privada y resistente a la censura.
Es el «walkie-talkie» de los activistas, la app de mensajería para el apocalipsis zombi, el chat para cuando te quedas sin datos en un festival. Es una idea brillante, necesaria y que defiende los principios de una internet descentralizada y libre. Pero su dependencia de la densidad de usuarios la convierte, al menos por ahora, en un fascinante experimento más que en una alternativa real para la comunicación del día a día.
En Gurú Tecno aplaudimos la audacia de Jack Dorsey. En un mundo dominado por los gigantes centralizados de Meta, crear una herramienta tan ‘punk’ y anárquica es un soplo de aire fresco. No le robará el trono a WhatsApp, pero nos recuerda que otra forma de comunicarnos es posible.
¿Te instalarías BitChat? ¿En qué situaciones crees que sería más útil? ¡Te leemos en los comentarios! Y no te olvides de seguir a Gurú Tecno en YouTube, Instagram y Facebook.