
La ansiedad por la batería es la enfermedad del siglo XXI. Ese 5% parpadeando en rojo cuando estás fuera de casa es una pequeña dosis de pánico instantáneo. La solución, claro, es una power bank. Pero eso nos lleva al segundo nivel del infierno tecnológico: darte cuenta de que llevas la batería en la mochila, pero te has olvidado el maldito cable en casa.
Pues bien, Xiaomi, en su cruzada por crear productos con sentido común, tiene un modelo que soluciona ambos problemas de un plumazo. Su Xiaomi Power Bank 20000 no es solo una bestia de la autonomía, es una genialidad del diseño práctico. Y por un precio de 20,99 euros, es, sencillamente, la compra más inteligente que puedes hacer.

La genialidad está en el cable (que no puedes perder)
Aquí está la magia, la idea tan simple que es insultante que no sea un estándar en toda la industria. La batería tiene un cable USB-C integrado en su propio cuerpo. No tienes que acordarte de cogerlo, porque ya está ahí. Es parte de la batería. Y no es un simple cable de salida; es bidireccional. Puedes usarlo para cargar tu móvil, y también para recargar la propia power bank.

Además de esta genialidad, sigues teniendo un puerto USB-C y un puerto USB-A libres, por lo que puedes cargar hasta tres dispositivos a la vez. Es una auténtica navaja suiza de la energía.
20.000 mAh: una central nuclear en tu mochila
20.000 miliamperios-hora. Es una cantidad de energía demencial para su tamaño y precio. Para que te hagas una idea de lo que puedes hacer con ella, puedes cargar:
- Un iPhone 16 Pro casi 4 veces.
- Un Redmi Note 14 Pro unas 3 veces.
- Una Xiaomi Pad 7 Pro casi 2 veces.

Para los gamers, es el compañero de viaje perfecto. Te da horas extra de vida para tu Steam Deck o tus Meta Quest 3. La carga rápida es de 22,5W, no es la más veloz del mercado, pero es más que suficiente para darte un buen chute de energía en poco tiempo.
La compra maestra
En un mercado inundado de power banks clónicas y sin alma, la Xiaomi Power Bank 20000 con cable integrado es una obra de arte del pragmatismo. No es la más rápida, no es la más pequeña, pero es, de lejos, la más inteligente y conveniente. Resuelve los dos grandes problemas del usuario: la falta de batería y el olvido del cable. Y lo hace con una capacidad gigantesca, múltiples protecciones de seguridad y un precio que es un regalo. Es uno de esos raros productos «sin peros».

¿Qué característica valoras más en una power bank: la capacidad, la velocidad de carga o la comodidad? ¿Conoces algún otro gadget con un detalle de diseño tan genial? El debate sobre los periféricos perfectos está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.