
En un mundo dominado por los smartphones de cristal y metal, hay un nombre que se resiste a desaparecer, un icono de una era pasada que sigue vivo gracias a la nostalgia y, sobre todo, a una estrategia de negocio increíblemente astuta. Hablamos, cómo no, de Nokia. Y ahora, su supervivencia está garantizada por unos cuantos años más.
Según informa el medio IndiaTimes, Nokia ha extendido su acuerdo de licencia de marca con HMD Global por otros tres años, lo que significa que la compañía finlandesa seguirá fabricando y vendiendo teléfonos con la mítica marca Nokia, como mínimo, hasta 2029.
El rey de un imperio olvidado: los ‘feature phones’
¿Por qué HMD sigue pagando por una marca que, en el mercado de smartphones, es casi irrelevante? La respuesta está en un mercado que muchos en Europa hemos olvidado, pero que sigue siendo gigantesco: el de los teléfonos básicos o feature phones.

En países como la India, que es el mayor mercado del mundo para este tipo de dispositivos, la marca Nokia sigue siendo sinónimo de durabilidad, fiabilidad y baterías que duran semanas. Y HMD Global ha sabido explotar esa herencia a la perfección, convirtiéndose en el líder absoluto del mercado de teléfonos básicos en la India, con una cuota de mercado del 22,4%.
Una estrategia de dos caras
Con esta extensión, la estrategia de HMD se consolida. Por un lado, seguirán explotando la «vaca lechera» de los teléfonos básicos con la marca Nokia, un negocio de bajo margen pero de un volumen de ventas brutal. Y por otro, intentarán hacerse un hueco en el saturado mercado de los smartphones con su propia marca, HMD, y con la esperanza de que, algún día, puedan repetir el éxito de su «hermana mayor».
El veredicto del Gurú
La supervivencia de la marca Nokia en el mundo de la telefonía es una de las historias más extrañas y a la vez más fascinantes de la industria. Es la prueba de que una marca fuerte, anclada en la memoria emocional de millones de personas, puede sobrevivir incluso a los mayores desastres empresariales.
No, no volveremos a ver un Nokia que compita de tú a tú con el iPhone o el Galaxy S. Esa guerra ya la perdieron. Pero mientras haya un solo rincón del planeta donde se necesite un teléfono que sirva para llamar, que aguante los golpes y cuya batería no te deje tirado, el nombre de Nokia seguirá vivo. Y eso, en un mundo de obsolescencia programada, es casi un acto de rebeldía.
¿Sigues teniendo cariño a la marca Nokia? ¿Crees que los teléfonos básicos todavía tienen sentido en 2025? El debate está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.