
Mark Zuckerberg lleva años y miles de millones de dólares invertidos en una obsesión: construir el dispositivo que sustituirá al smartphone. Y en su evento anual, el Meta Connect 2025, por fin ha puesto sobre la mesa la primera arma que de verdad tiene el potencial de conseguirlo. Olvídate de las gafas con cámara. Olvídate de los experimentos. Han presentado las Meta Ray-Ban Display.
Y no son una simple actualización. Son una auténtica revolución. Son las primeras gafas inteligentes para el mercado de masas que integran una pantalla directamente en el cristal y, lo que es aún más espectacular, se controlan con una pulsera que lee tus impulsos neuronales. Es pura ciencia ficción hecha realidad, un producto que, por un precio de 799 dólares, nos da el primer vistazo real al futuro de la computación personal.
La pantalla invisible: tu mundo, aumentado
Aquí reside la primera gran genialidad. Las Meta Ray-Ban Display incorporan una pequeña pero potente pantalla en la lente derecha. Con una resolución de 600×600, 90Hz de refresco y un brillo que alcanza los 5.000 nits, es capaz de superponer información digital sobre tu campo de visión de una forma nítida y legible, incluso a plena luz del día.

Podrás ver las indicaciones del mapa, responder mensajes, recibir notificaciones o incluso generar subtítulos de una conversación en tiempo real. Y lo más importante: Meta asegura que la filtración de luz es tan baja (<2%) que nadie a tu alrededor podrá ver lo que estás viendo, garantizando tu privacidad.
El control neuronal: la magia de la electromiografía
Pero una pantalla en unas gafas no sirve de nada si controlarla es un engorro. Y aquí es donde Meta ha desatado su arma secreta: la pulsera Meta Neural Band. Este dispositivo, que se lleva en la muñeca, utiliza la electromiografía superficial para leer las señales eléctricas que tus nervios envían a los músculos de tu mano.

¿Traducción? Puedes controlar la interfaz de las gafas con gestos sutiles de tus dedos, sin que una cámara necesite verlos. Podrás hacer scroll frotando el índice contra el pulgar o escribir trazando letras en cualquier superficie. Es una forma de interacción mucho más discreta e intuitiva que hablarle a las gafas en público.
Un ordenador en tu cara (con la firma de Ray-Ban)
Bajo el capó, las Meta Ray-Ban Display son un auténtico ordenador. Están impulsadas por el chip Snapdragon AR1 Gen 1 de Qualcomm, tienen 32GB de almacenamiento y una autonomía de hasta 6 horas, que se extiende a 30 con el estuche de carga. La cámara de 12 megapíxeles te permite grabar vídeo en 1080p y hacer fotos, y los seis micrófonos con audio espacial garantizan una calidad de llamada espectacular.
Y todo esto, empaquetado en un diseño de Ray-Ban que, por primera vez, no grita «soy un gadget para frikis».
El veredicto del Gurú
Las Meta Ray-Ban Display son, sin duda, el producto de primera generación más emocionante y ambicioso que hemos visto en años. Son el primer dispositivo que de verdad empieza a cumplir la promesa de la computación ambiental, de una tecnología que se integra de forma invisible en nuestro día a día.
Con un precio de 799 dólares y una disponibilidad inicial limitada a Estados Unidos, no serán un producto de masas de la noche a la mañana. Pero marcan un antes y un después. Son la prueba de que el futuro post-smartphone ya no es una fantasía. Es una realidad. Y Mark Zuckerberg, nos guste o no, acaba de dar el primer gran paso para construirlo.
¿Te comprarías unas gafas como estas? ¿Crees que el control por gestos es el futuro de la interacción? El debate está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.