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La HUMILLACIÓN del siglo: Apple se rinde en la guerra de la IA y negocia con Google para que Gemini sea el nuevo cerebro de Siri

agosto 23, 2025

Es la noticia que hace temblar los cimientos de Silicon Valley. Es la admisión de un fracaso colosal. Apple, la compañía más rica, más orgullosa y más secretista del planeta, ha sido pillada negociando con su archienemigo, Google, para licenciar su tecnología de inteligencia artificial, Gemini, y usarla como el motor para resucitar a su comatoso asistente, Siri.

La bomba, soltada cómo no por el periodista de Bloomberg Mark Gurman, es la confirmación de lo que muchos sospechábamos: el proyecto de IA de Apple es un desastre. Después de años de desarrollo y miles de millones invertidos, han tenido que agachar la cabeza y llamar a la puerta del vecino para pedirle ayuda. Es una humillación sin precedentes.

La crónica de un fracaso anunciado: crisis interna y fuga de talento

Para entender cómo Apple ha llegado a esta situación, hay que mirar dentro de sus muros. El proyecto para crear una nueva y revolucionaria versión de Siri, que debía lanzarse esta primavera, ha sido un fracaso tan estrepitoso que se ha pospuesto hasta el año que viene. Este retraso, según Gurman, ha provocado una guerra civil interna: el jefe de IA, John Giannandrea, ha sido apartado, y el proyecto ha pasado a manos del jefe de software, Craig Federighi.

Pero el problema es aún más profundo. Apple está sufriendo una fuga de talento masiva en su equipo de IA. Como ya analizamos, ingenieros clave están huyendo a la competencia, especialmente a Meta, que les ofrece salarios pornográficos de hasta 200 millones de dólares. Nadie quiere estar en un barco que se hunde, y el de la IA de Apple tiene vías de agua por todas partes.

El plan B (y C): llamando a la competencia

Incapaces de construir un modelo propio a la altura de los de la competencia, en Cupertino han activado el plan de pánico. Según las fuentes de Gurman, están explorando activamente la posibilidad de colaborar con un socio externo. Y no solo han hablado con Google. También han contactado con OpenAI (para usar ChatGPT) y con Anthropic (para usar Claude).

Apple tiene dos versiones de la nueva Siri en desarrollo: «Linwood», basada en su propio y maltrecho modelo, y «Glenwood», basada en tecnología externa. El hecho de que las negociaciones con Google ya estén en una fase donde se está adaptando Gemini a los servidores de Apple, indica que la opción de rendirse y usar la tecnología de su rival es muy, muy real.

Una alianza extraña pero lógica

Aunque Apple y Google compiten ferozmente, esta alianza no sería tan extraña. Google ya le paga a Apple miles de millones de dólares cada año para ser el motor de búsqueda por defecto en el iPhone. Un acuerdo similar por la IA es perfectamente plausible.

Para Apple, sería una forma de ganar tiempo, de no quedarse aún más atrás en la carrera de la IA mientras intentan arreglar su desastre interno. Para Google, sería la victoria definitiva: su tecnología de IA corriendo de forma nativa en los más de mil millones de iPhones que hay en el mundo.

El fin del mito de la autosuficiencia

Este movimiento es el fin del mito de Apple como una fortaleza autosuficiente. Demuestra que, en la era de la IA, ni siquiera la compañía más poderosa del planeta puede hacerlo todo sola. Su legendaria integración de hardware y software se ha topado con un muro, y ese muro se llama «modelos de lenguaje a gran escala».

La ironía es brutal. Durante años, nos hemos reído de lo estúpida que es Siri. Ahora, para que Siri deje de serlo, Apple podría tener que meterle el cerebro de su mayor enemigo.

¿Crees que Apple debería tragarse su orgullo y usar la IA de Google? ¿O deberían seguir intentándolo solos aunque tarden más? El futuro del asistente más famoso (y más inútil) del mundo está en juego. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.

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