
En el universo de Elon Musk, las guerras corporativas no se libran solo en los balances de cuentas. Se libran en X (Twitter), con memes, insultos y, ahora, en la oficina de patentes. xAI, su compañía de inteligencia artificial valorada en 50.000 millones de dólares, acaba de confirmar el secreto peor guardado: ha solicitado oficialmente el registro de la marca «Macrohard».
Sí, has leído bien. La misma broma de patio de colegio que llevamos escuchando desde los años 90. Pero cuando la hace uno de los hombres más ricos del planeta, deja de ser un chiste y se convierte en una declaración de guerra.
El origen del odio: una vendetta personal
Para entender esta jugada, hay que rebobinar. Musk le tiene una tirria monumental a Bill Gates, cofundador de Microsoft. Todo explotó cuando se enteró de que Gates estaba apostando en corto contra las acciones de Tesla (básicamente, apostando a que la empresa se hundiría). Desde entonces, Musk no ha perdido oportunidad para atacarle públicamente.

Este movimiento no es solo negocio. Es una vendetta personal llevada al nivel de marca registrada. Es el equivalente multimillonario a pintarle bigotes a la foto de tu enemigo en el anuario del instituto y luego comprar el instituto entero.
La confirmación llegó después de que Musk insinuara el nombre en X y respondiera con un simple emoji de guiño a un usuario que lo adivinó. Ahora, la solicitud de 2.300 dólares en la Oficina de Patentes de EEUU lo hace oficial.
«Macrohard»: el futuro ejército de agentes de IA
Pero detrás de la broma hay una estrategia muy seria. «Macrohard» no será solo un nombre gracioso en un papel. Será la filial de xAI encargada de desarrollar y operar cientos de agentes de IA especializados.
Su misión: crear IAs que programen código, que generen imágenes y vídeos, y que, en definitiva, compitan directamente con las herramientas de IA de Microsoft, como GitHub Copilot y sus profundas integraciones con OpenAI. Musk no solo quiere burlarse de Microsoft, quiere robarle el almuerzo.
El veredicto del Gurú: ¿Genialidad o pataleta?
La jugada de Musk es una genialidad y una infantilada a partes iguales.
- La genialidad: Es una campaña de marketing viral que no le ha costado un duro. Todo el planeta tecnológico está hablando de «Macrohard». Ha conseguido que el nombre de su nueva empresa esté en boca de todos antes incluso de lanzar un solo producto.
- La pataleta: Demuestra que, a pesar de su fortuna y su poder, Musk sigue operando con la mentalidad de un shitposter de internet. Es un movimiento que busca la provocación por encima de la profesionalidad.
Sea como sea, la guerra está declarada. Y mientras Microsoft invierte miles de millones en una estrategia corporativa seria, Musk contraataca con una broma de los 90 y la promesa de un ejército de IAs. El siglo XXI en estado puro. Va a ser un espectáculo digno de ver.
¿Es Musk un genio del marketing o un niño rico con demasiado tiempo libre? ¿Tiene «Macrohard» alguna posibilidad contra el gigante Microsoft? La batalla más troll de la historia de la tecnología empieza en los comentarios. Únete al debate en Instagram, Facebook y YouTube.