Si ya has pasado la barrera de los 40, conoces el drama. Ese momento humillante en el que tienes que alejar el móvil con el brazo extendido para poder leer un WhatsApp, como si fueras un miope de dibujos animados. La presbicia, o «vista cansada», es el peaje casi inevitable de hacerse mayor, una condena a depender de unas gafas para leer. Hasta ahora.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) acaba de dar luz verde a VIZZ, unas gotas para los ojos desarrolladas por la farmacéutica LENZ que prometen una auténtica revolución: corregir la presbicia y devolverte una visión nítida para leer de cerca sin necesidad de gafas, cirugía ni artilugios raros. Es un avance espectacular, pero como toda buena tecnología, viene con una letra pequeña que hay que leer con atención (si puedes).
La ciencia del ‘agujero de alfiler’ sin dolor
Primero, el problema: con la edad, el cristalino de tu ojo (la lente natural que enfoca) se endurece y pierde la capacidad de contraerse para ver de cerca. Por eso ves borroso. Las soluciones hasta ahora eran las gafas o unas gotas «mióticas» que contraen la pupila a la fuerza, a menudo a costa de forzar los músculos oculares y provocar efectos secundarios.
VIZZ, con su principio activo aceclidina, también es una gota miótica, pero una de nueva generación. En lugar de forzar los músculos, consigue el mismo efecto de «cabeza de alfiler» (una pupila más pequeña aumenta la profundidad de foco, como cuando cierras el diafragma en una cámara de fotos) de una forma mucho más suave. Esto se traduce en menos efectos secundarios, como dolores de cabeza o dificultad para ver de noche.
La letra pequeña: 10 horas de superpoderes al día
Y aquí es donde la fantasía de tirar las gafas a la basura choca con la realidad. VIZZ no es una cura. Es un «modo turbo» temporal para tus ojos.
- El efecto Cenicienta: El efecto de las gotas dura un máximo de 10 horas. Ni un minuto más.
- Una dosis diaria: Solo se pueden usar una vez al día.
Esto te obliga a tomar una decisión estratégica cada mañana: ¿cuándo quieres usar tus 10 horas de visión perfecta? ¿Las gastas en tu jornada laboral para no tener que usar las gafas delante del ordenador? ¿O te las guardas para la noche, para poder leer el menú en un restaurante sin parecer tu abuelo? El resto del día, amigo mío, vuelves a ser un esclavo de tus gafas. No es un sueño perfecto, pero es una ayuda increíble.
El futuro de la visión está en un bote
VIZZ es un avance espectacular, no nos equivoquemos. Es el primer paso hacia un futuro donde muchas afecciones oculares podrían tratarse con farmacología de alta precisión en lugar de con cristales o láser. Es una herramienta potentísima que dará libertad y comodidad a millones de personas. La compañía LENZ las lanzará al mercado en Estados Unidos en unos tres meses. A Europa, como siempre, tardarán más en llegar.
Es un parche de alta tecnología para una de las mayores molestias de la edad adulta. Pero la revolución total, el verdadero «adiós a las gafas», todavía está a unos años de distancia.
¿Usarías unas gotas que te dieran 10 horas de visión perfecta al día? ¿Es este un avance suficiente o esperarías a una solución definitiva? El debate sobre el futuro de la corrección visual está más nítido que nunca. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.