
La resistencia antimicrobiana (RAM), que genera las temidas «superbacterias», es uno de los desafíos de salud pública más apremiantes a nivel mundial. Un informe reciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya señalaba una grave escasez de fármacos antimicrobianos en desarrollo, con una inversión limitada debido a la complejidad y falta de incentivos comerciales.
Pero ahora, un equipo de químicos de la Universidad de Warwick (Reino Unido) y la Universidad de Monash (Australia) ha descubierto un prometedor antibiótico: la lactona pre-metilenomicina C. Esta sustancia es capaz de eliminar superbacterias como el Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (SARM) y los enterococos resistentes a la vancomicina (ERV). Los hallazgos se publicaron en la prestigiosa revista Journal of the American Chemical Society el 27 de octubre.
«Oculto a plena vista»: un intermediario olvidado
Lo más sorprendente de este descubrimiento es que esta sustancia en realidad ha estado «oculta a plena vista»: es un producto químico intermedio que se produce durante la preparación del antibiótico de uso común metilenomicina A, descubierto hace 50 años.
«La metamicina A se descubrió hace 50 años y, aunque se ha sintetizado muchas veces, parece que nadie ha probado la actividad antibacteriana de los intermediarios sintéticos», dijo Greg Challis, profesor de la Universidad de Warwick y de Monash, y coautor correspondiente del estudio.
Añadió: «Al eliminar los genes biosintéticos relevantes, descubrimos dos intermediarios biosintéticos previamente desconocidos, ambos con una potencia antibacteriana muy superior a la de la propia metamicina A».
100 veces más potente y sin signos de resistencia
Este estudio descubrió que la lactona de prometomomicina C (un intermediario en la síntesis de memetomomicina A) exhibe una actividad antibacteriana más de 100 veces superior contra diversas bacterias Gram-positivas que el antibiótico original memetomomicina A. Los experimentos demostraron su eficacia contra Staphylococcus aureus, causante de SARM, y enterococos resistentes a la vancomicina, causantes de ERV.
Otra coautora, Lona Alkhalaf, profesora asistente de la Universidad de Warwick, afirmó: «Resulta sorprendente que el actinomiceto que produce las lactonas de metamicina A y premetimicina C —Streptomyces coelicolor— sea una bacteria modelo productora de antibióticos que se ha estudiado extensamente desde la década de 1950. Es verdaderamente inesperado encontrar un nuevo antibiótico en un microorganismo tan conocido».

Señaló: «Parece que S. coelicolor evolucionó originalmente para producir un potente antibiótico (lactona de prometamidocina C), pero luego lo modificó gradualmente hasta convertirlo en un antibiótico más débil —metamidocina A— que puede desempeñar un papel diferente en la fisiología bacteriana».
Cabe destacar que, en los experimentos, los investigadores no detectaron signos de resistencia a la pre-metoximetileno C lactona, mientras que estas cepas sí desarrollaron resistencia a la vancomicina en las mismas condiciones. Dado que la vancomicina se considera un último recurso en el tratamiento de las infecciones por enterococos, este hallazgo es significativo para abordar la resistencia respiratoria variable (ERV).
El profesor Charles afirmó: «Este descubrimiento ofrece un nuevo enfoque para el desarrollo de antibióticos. Al identificar y probar intermediarios en las rutas biosintéticas de compuestos naturales, podríamos encontrar nuevos antibióticos más potentes y menos resistentes, lo que proporcionaría nuevas armas en la lucha contra la resistencia antimicrobiana».
Los investigadores señalan que la lactona C de premetoxicina tiene una estructura simple, una actividad fuerte, es difícil que induzca resistencia a los medicamentos y es fácil de sintetizar, lo que la convierte en una candidata prometedora para una nueva generación de fármacos antibacterianos, brindando una nueva esperanza a los más de 1,1 millones de personas en todo el mundo que mueren cada año por infecciones resistentes a los antibióticos.

En conclusión, este descubrimiento es un rayo de esperanza en la sombría batalla contra las superbacterias. La lactona pre-metilenomicina C no solo es sorprendentemente potente y eficaz contra cepas resistentes, sino que su origen «oculto a plena vista» abre una nueva vía de investigación para encontrar fármacos en lugares inesperados.
La promesa de un nuevo antibiótico con baja probabilidad de inducir resistencia y fácil síntesis podría salvar millones de vidas y cambiar drásticamente el curso de la lucha contra la resistencia antimicrobiana. ¡Te leemos en los comentarios! Y no te olvides de seguir a Gurú Tecno en YouTube, Instagram y Facebook.