En la multimillonaria y lentísima industria de la fabricación de coches, el proceso siempre ha sido el mismo: diseñas, construyes un prototipo, lo pruebas hasta reventarlo, lo corriges y vuelves a empezar. Un ciclo de años que cuesta una fortuna. Pues bien, Porsche, en el desarrollo de su próximo y esperado Cayenne totalmente eléctrico, ha decidido que se acabó. Y ha dado un salto al futuro.
Según informa el medio especializado Carscoops, citando al jefe de I+D de Porsche, Michael Steiner, por primera vez en su historia, han pasado directamente de las pruebas 100% digitales a la fase de preproducción, saltándose la costosa y lenta fase de fabricación de prototipos iniciales. ¿Su arma secreta? La inteligencia artificial.
‘Pruebas de conducción digitales’: el Nürburgring en un ordenador
En lugar de construir docenas de mulas de prueba, los ingenieros de Porsche han creado un gemelo digital del Cayenne eléctrico de una fidelidad sin precedentes. Este prototipo virtual les ha permitido realizar una «prueba de conducción digital» desde las primeras etapas del diseño.
Este sistema es capaz de simularlo todo: desde una vuelta a fondo en el infierno verde de Nürburgring hasta el comportamiento del coche en un atasco, pasando por diferentes superficies de carretera y condiciones de adherencia de los neumáticos. Pueden cambiar los amortiguadores, los neumáticos o cualquier otro componente con un solo clic para encontrar la configuración óptima en cuestión de horas, no de meses.
El resultado, según Porsche, es una revolución: han eliminado la necesidad de fabricar unos 120 vehículos de prueba y han acortado el ciclo de desarrollo total en un 20%.
La cruda realidad sigue existiendo
Eso sí, que no cunda el pánico entre los puristas. Porsche admite que las pruebas físicas siguen siendo esenciales. Una vez validado el diseño digital, una flota de prototipos de preproducción sigue recorriendo el mundo, desde el calor extremo del Valle de la Muerte (+50 °C) hasta el frío polar de Escandinavia (-35 °C), para asegurar que el coche se comporta a la perfección en el mundo real.
Un vistazo a la bestia
El Cayenne totalmente eléctrico, que se lanzará este invierno y saldrá a la venta a principios de 2026, será una auténtica bestia. Construido sobre una plataforma PPE de 800V, tendrá una batería de 108 kWh y una autonomía WLTP de 600 km. Y para los que echen de menos la gasolina, emitirá un rugido similar al de un V8 en su modo más deportivo.
El veredicto del Gurú
La nueva estrategia de desarrollo de Porsche es una de las mayores revoluciones en la industria del automóvil en décadas. Es la prueba de que la inteligencia artificial no solo va a cambiar cómo conducimos los coches, sino, y más importante, cómo se fabrican.
Es una jugada de una eficiencia brutal que les permitirá desarrollar nuevos modelos más rápido y con menos costes, una ventaja competitiva masiva. La era de los prototipos camuflados que tardaban cinco años en llegar a la calle ha terminado. El futuro de la ingeniería automotriz es digital. Y Porsche, como siempre, va en el carril izquierdo.
¿Crees que las pruebas virtuales pueden de verdad sustituir a las reales? ¿O se perderá el «alma» de los coches en el proceso? El debate está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.