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China se cansa de esperar y empieza a construir su ‘Blade Runner’: el plan de Pekín para crear una SOCIEDAD de robots

agosto 11, 2025

Mientras en Occidente la robótica avanzada sigue siendo el dominio de un puñado de startups de élite y laboratorios universitarios que suplican por financiación, China ha decidido que ese modelo de libre mercado es demasiado lento. Pekín, a través de su brutal motor tecnológico, la zona de desarrollo de Yizhuang, ha decidido que no va a esperar a que el futuro llegue. Va a construirlo. A la fuerza.

En la Conferencia Mundial de Robótica, han presentado el «Plan Experimental de la Sociedad Inteligente Encarnada». Olvídate del nombre rimbombante. La traducción es simple: van a crear la primera ciudad del mundo diseñada por y para la interacción entre humanos y robots inteligentes, con un objetivo claro: que los robots «entren en miles de hogares y sirvan a miles de industrias».

La receta del ‘milagro’ chino: un plan de cuatro pilares

Lo que Pekín ha puesto sobre la mesa no es un simple fondo de inversión. Es un ecosistema completo, una estrategia de estado para dominar la robótica de arriba a abajo. Y se basa en cuatro pilares que deberían hacer temblar a cualquier competidor.

  1. El Gran Hermano de los datos: El primer paso es crear el mayor y más rico banco de datos del mundo para entrenar IAs. Abrirán casi 1.000 «centros de datos del mundo real» (supermercados, hospitales, hoteles, fábricas) para grabar interacciones y generar un «banco de datos a escala de petabytes» que será de código abierto para sus empresas. Le darán a sus IAs los ojos para ver y aprender del mundo real a una escala nunca vista.
  2. Robots GRATIS para desarrolladores: Esta es la jugada más salvaje y disruptiva. Crearán una «comunidad de desarrollo secundario» donde proporcionarán a los equipos, startups y universidades cuerpos de robots universales gratis, espacio para trabajar y ayudas para la computación. Es una forma de acelerar la creación de «apps» para robots a una velocidad demencial, eliminando la gigantesca barrera del coste del hardware.
  3. La fábrica del Estado: No se fían de dejar la producción en manos del mercado. Van a ser pioneros en crear una planta piloto de producción en masa para robots humanoides, ofreciendo servicios de transferencia de tecnología y pruebas. Es la intervención estatal en su máxima expresión para asegurar la calidad y la velocidad de fabricación.
  4. Creando la demanda a dedo: Y para asegurarse de que los robots se venden, el propio gobierno va a «liberar gradualmente la demanda» de 10.000 robots en los próximos dos años para equipar fábricas, escuelas, hospitales y otros servicios públicos, con más de 1.000 de ellos siendo humanoides. Crean la oferta y luego fuerzan la demanda. Un ciclo perfecto.

Una ofensiva total y sin precedentes

Este plan de Beijing Yizhuang es la materialización de la estrategia china. No es una empresa compitiendo contra otra. Es un Estado entero, con todos sus recursos, empujando en una única dirección con una visión a largo plazo. Han identificado la robótica inteligente como la próxima gran revolución industrial y están invirtiendo a una escala que ninguna empresa o consorcio occidental puede igualar. Mientras en el resto del mundo discutimos sobre la ética de un robot que quita un puesto de trabajo, en China ya han montado un festival de consumo de robots, una liga de fútbol robótica y la primera tienda «4S» del mundo para venderlos.

La pregunta ya no es si China liderará la robótica del futuro. La pregunta es si el resto del mundo será capaz de reaccionar antes de que la brecha sea completamente insalvable.

¿Es esta estrategia de intervención total el único camino para ganar la carrera de la IA y la robótica? ¿O es una visión distópica de una sociedad controlada por la tecnología estatal? El futuro se está construyendo ahora en Pekín. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.

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