
Apple sigue empujando su maquinaria de actualizaciones con la precisión de un reloj suizo… o de un reloj carísimo que se renueva cada año aunque no lo necesites. En su universo, cada pequeño avance se envuelve en fuegos artificiales y fanfarrias, mientras tú te preguntas si el nuevo chip realmente hará algo que tu dispositivo actual no pueda.
Y aquí es donde entra Mark Gurman, ese oráculo moderno que saca más secretos de Apple que los propios empleados de Cupertino. Según su último informe, el iPad Pro con chip M5 está en camino, una actualización que en cualquier otra empresa parecería insignificante, pero que Apple convierte en evento global. Sin embargo, hay un giro inesperado: este podría ser el último gran upgrade hasta 2027. ¿Por qué? Porque lo verdaderamente gordo viene después.
Y es que en el horizonte ya asoma el iPad Pro con chip M6 y un módem propio de Apple, el C-series, que promete velocidades demenciales, conectividad satelital y el tipo de mejoras que justificarían, por fin, un cambio de dispositivo sin sentir que estás tirando el dinero.
La estrategia está clara: dar un paso suave ahora con el M5, mientras se cocina a fuego lento el rediseño total que llegará con el M6. La pregunta es si podrás resistir la tentación de actualizar antes de que llegue lo verdaderamente revolucionario… o si volverás a caer en el ciclo de «mejoras menores con precio premium«.
iPad Pro M6 en 2027: el futuro que se cocina a fuego lentísimo
Cuando finalmente llegue el iPad Pro con chip M6 en 2027, Apple no solo quiere que lo veas como una actualización, sino como el nacimiento de una nueva era. El plato fuerte será el debut real de su módem C-series, un chip de conectividad diseñado por la propia Apple para cortar de raíz su dependencia con Qualcomm. ¿El primero de la línea? El C1, que ya debutó discretamente en el iPhone 16e, y que será refinado y potenciado en futuras versiones para el iPad Pro.
Y aquí viene la promesa envuelta en palabras mágicas: velocidades de conexión de otro planeta, mejoras sustanciales en mmWave, conectividad satélite incorporada y, por supuesto, la típica frase de marketing de Apple del tipo “el iPad más conectado de la historia”.
Pero vayamos al grano. La tecnología existe hoy. Apple simplemente está regulando su dosis de innovación como si fuera oxígeno en una nave espacial: solo lo suficiente para mantenerte vivo y enganchado al ecosistema. ¿Conectividad satelital? Ya la tienen los iPhone. ¿Módem propio? También. ¿Qué falta entonces? Nada… excepto su permiso para liberarlo todo de golpe.
Y es ahí donde entra el gran dilema: ¿tres años más para ver un iPad que de verdad justifique su apellido Pro? Si Apple piensa hacernos esperar tanto, más le vale que el M6 traiga café, escritorio plegable y tal vez funciones de teletransportación, porque lo que hoy parecen avances “esperables” en otras marcas, en Apple siguen siendo promesas diferidas con una etiqueta de mil euros extra.
En resumen: el futuro del iPad Pro pinta potente, pero está a años luz. Y mientras tanto, toca conformarse con versiones M5 que mejoran lo justo para justificar otro keynote… y poco más.
MacBook Pro M5: más de lo mismo, con el mismo diseño
El MacBook Pro M5 llegará antes, sí. Pero será lo que en Apple llaman un chip-and-ship: cambia el motor, pero la carrocería sigue igual. Lo importante viene en 2026, justo para el 20º aniversario del MacBook Pro, donde por fin se sacarán un rediseño completo de la manga: pantalla OLED, un chasis más delgado y, por supuesto, el chip M6 como estrella del show.

Este rediseño sí suena a evolución real, pero también es una jugada muy Apple: te mantienen en pausa dos años con actualizaciones mínimas para luego soltarte una bomba estética y tecnológica que te hará pensar “¿cómo viví sin esto antes?”.
Conclusión Gurú: Apple está afinando su estrategia de “dosis mínimas de innovación” hasta que llegue el rediseño que realmente te hará abrir la cartera. El iPad Pro M5 y el MacBook Pro M5 serán más rápidos, pero no cambiarán tu vida. Para eso, toca esperar al M6, al OLED y a las fiestas de aniversario en 2026 y 2027. Hasta entonces, actualiza solo si tu dispositivo actual te da lástima… o si el FOMO puede contigo.