Carl Pei, el fundador de OnePlus y actual CEO de Nothing, no es un ejecutivo al uso. Es un visionario, un maestro del hype y, a veces, un provocador. Y en sus últimas declaraciones, tras cerrar una ronda de financiación de 200 millones de dólares que valora su compañía en 1.300 millones, ha desvelado una hoja de ruta tan demencialmente ambiciosa que hace que la competencia parezca anclada en el pasado.
Si pensabas que Nothing era solo una marca de móviles y auriculares con diseños transparentes, te equivocabas. Eso ha sido solo el principio. El plan de Pei es evolucionar más allá de los smartphones para atacar todos los frentes de la tecnología de consumo. Y sí, eso incluye gafas inteligentes, vehículos eléctricos y hasta robots humanoides.
La crítica al estado actual de la IA: una oportunidad
La visión de Pei parte de una crítica brutalmente honesta al estado actual de la industria. Aunque sigue convencido de que «el smartphone seguirá siendo uno de los dispositivos más importantes», también ataca la falta de innovación real en la IA móvil.
Critica que, tres años después de la explosión de la IA generativa, sigamos con las mismas funciones de siempre: edición de fotos, traducciones y asistentes que «apenas funcionan». Y su tesis es clara: para que la IA alcance su verdadero potencial, «el hardware debe ser reinventado en paralelo».
El arma secreta: un sistema operativo para gobernarlos a todos
Y aquí es donde reside el arma secreta de Nothing, la pieza que unirá todo este futuro ecosistema de gadgets. La clave, según Pei, será el desarrollo de un nuevo sistema operativo centrado en la IA. Un sistema que, como ya adelantó hace tiempo, supondrá el «fin de las apps« tal y como las conocemos.
La idea es crear un sistema operativo contextual, que se anticipe a nuestras necesidades y que funcione de forma fluida y unificada en todo tipo de dispositivos: móviles, relojes, auriculares, altavoces, gafas, coches y robots. Nothing no quiere ser una empresa de hardware. Quiere ser una empresa de software y de IA que controle la experiencia de usuario en todo su ecosistema.
El veredicto del Gurú: una ambición desmedida (o genial)
La visión de Carl Pei es de una ambición desmedida. Pasar de fabricar móviles a fabricar coches y robots es un salto mortal que ha llevado a la quiebra a empresas mucho más grandes. Sin embargo, su enfoque centrado en el software y en un sistema operativo unificado es increíblemente inteligente.
Es la misma estrategia que le funcionó a Apple: crear un ecosistema de hardware y software tan perfectamente integrado que, una vez que entras, no quieres (ni puedes) salir. Es una apuesta de «todo o nada». Si les sale bien, Nothing podría convertirse en uno de los jugadores más importantes de la próxima década. Si les sale mal, será uno de los fracasos más espectaculares de la historia de la tecnología. Pero conociendo a Carl Pei, el viaje, como mínimo, será divertido de ver.
¿Crees que la visión de Carl Pei es realista? ¿O está soñando demasiado alto? El futuro de la tecnología se escribe con estas apuestas demenciales. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.