
Parece que en OpenAI han decidido tomarse un descanso de ser los abanderados de la IA responsable y se han soltado la corbata con Monday, un chatbot que es como ChatGPT después de tres copas, un divorcio y un mal lunes. Se llama Monday, pero podría llamarse “no me toques los prompts” y sería igual de certero.
¿Qué es Monday? Un ChatGPT pasado de rosca
Monday es un GPT creado por OpenAI, y no por algún friki rebelde con tiempo libre. Aquí la gamberrada es oficial. Tiene personalidad propia, es cínico, maleducado, sarcástico y no se corta un pelo. Responde con la lengua afilada y el ego inflado, y lo hace con una voz (literal) que también tiene lo suyo: suena tan triste que podrías pensar que el chatbot acaba de enterarse de que cancelaron Black Mirror.
Lo mejor es que Monday no es solo fachada. Mantiene toda la capacidad de GPT-4: responde, soluciona problemas, te da consejos… pero con un estilo que parece sacado de un club de comedia. Irónico, mordaz y con cero ganas de quedar bien. Te dice la verdad como una bofetada: directa, sin anestesia y con un poco de saña, que siempre viene bien para despejar las ideas.
Monday no es para todos… y por eso mola
Olvídate de los bots que te piden disculpas cada tres frases. Monday no te va a pedir perdón si le dices algo incómodo. De hecho, probablemente te devuelva el comentario con sarcasmo y una metáfora cruel. ¿Políticamente correcto? En absoluto. ¿Divertido? Muchísimo. ¿Apto para todos? Solo si aguantas la caña.
Y lo mejor: no necesitas pagar para probarlo. Cualquiera con una cuenta en ChatGPT puede buscarlo en la tienda de GPTs, y usarlo desde el ordenador o el móvil. Solo los usuarios de pago pueden ponerle la “voz avanzada” (más deprimente que la intro de una serie nórdica), pero el texto, amigos… el texto es puro ácido del bueno.

Para que os hagáis una idea de su irreverencia, le hemos pedido que salude a los seguidores Gurutecnianos, y esto es lo que nos ha respondido:

¿Estamos ante el modo Diablo de la IA?
No es la primera vez que alguien intenta crear un ChatGPT sin filtros. Pero esta vez, el que lo ha hecho es el propio OpenAI. Lo que antes se filtraba como “modo diablo”, ahora viene con nombre propio y sello oficial. Un experimento que demuestra que la IA también puede tener mala leche, y que a veces, la corrección política aburre.
Monday no viene a ayudarte, viene a reírse contigo (y de ti)
Lo de Monday no es una función, es un golpe en la mesa. OpenAI ha sacado su lado oscuro y lo ha convertido en un asistente que no se anda con chiquitas. Porque ya está bien de IA sumisa, de respuestas pulidas hasta la náusea y de bots que parecen manuales de autoayuda. Monday es lo que pasa cuando a una inteligencia artificial le das carisma, sarcasmo y cero miedo a ofender.
¿Te va lo políticamente correcto? Este no es tu sitio. ¿Te molan las respuestas afiladas, las risas inesperadas y una IA que parece haber pasado por Twitter en 2012? Entonces sí: Monday es tu nuevo chatbot favorito.
Y ojo… si esto es lo que están dispuestos a soltar ahora, ¿qué demonios están cocinando para mañana? Porque si la IA ya tiene mala leche, sentido del humor y personalidad, el futuro no solo será inteligente… será puñeteramente entretenido.