
Marshall, la marca cuyo logo ha presidido los escenarios de los conciertos de rock más legendarios de la historia, ha decidido que ya está bien de que otros se lleven el pastel del audio para fiestas. Y su primer asalto a esta categoría es, como no podía ser de otra manera, una declaración de intenciones tan potente como un riff de guitarra de AC/DC: el nuevo Marshall Bromley 750.
No es un simple altavoz Bluetooth. Es un auténtico amplificador de directo reconvertido en un sistema de sonido portátil. Un monstruo que no solo promete una potencia sonora espectacular, sino que lo hace con el estilo inconfundible de la marca y una serie de características increíblemente inteligentes. Eso sí, el capricho no es barato: ya se puede reservar por 1.299 dólares.
Diseño y potencia de un concierto de rock
El Bromley 750 no se esconde. Su diseño es el de un amplificador de guitarra Marshall clásico, con su rejilla frontal y su logo icónico. Y para completar la experiencia de directo, han integrado iluminación de escenario LED detrás de esa rejilla, con animaciones que reaccionan en tiempo real a la música que estás reproduciendo.

Pero la verdadera magia está en el sonido. Marshall promete un sonido estéreo de 360 grados diseñado para «llegar a cualquier público», ya sea en el salón de tu casa o en una fiesta en el jardín. Además, incluye un control de tono para ajustar el perfil de sonido entre un modo «claro» para interiores y un modo «potente» para exteriores. Y para los que quieren montar su propio concierto, incluye dos conectores para enchufar micrófonos o instrumentos.

La genialidad: una batería extraíble de 40 horas
Aquí es donde el Bromley 750 humilla a la competencia. En un mundo de baterías integradas con obsolescencia programada, Marshall ha optado por la solución más pro-consumidor posible: una batería reemplazable.

La batería, que ofrece más de 40 horas de autonomía, se puede quitar y cambiar, lo que no solo alarga la vida útil del altavoz hasta el infinito, sino que permite a los más fiesteros tener una segunda batería cargada y lista para que la música no pare nunca. Es una bofetada de sentido común a toda la industria.

Un tanque con ruedas
Como es de esperar en un producto de este calibre, está construido como un tanque. Tiene una clasificación de resistencia al agua IP54, por lo que aguantará sin problemas la lluvia ligera o el derrame de alguna bebida. Y para mover esta bestia, han integrado un asa retráctil y ruedas, como si fuera una maleta de viaje.

El Marshall Bromley 750 es la apuesta de una marca legendaria por un mercado nuevo para ellos. Y han entrado por la puerta grande, con un producto que no solo suena bien, sino que es increíblemente inteligente en su diseño (la batería extraíble es una genialidad) y que respeta el ADN de la marca. Es, sin duda, el nuevo objeto de deseo para cualquiera que se tome sus fiestas en serio.
¿Pagarías más de 1.000€ por un altavoz para fiestas como este? ¿Es la batería extraíble la característica que todos los altavoces portátiles deberían tener? El debate está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.