Jensen Huang, el carismático CEO de Nvidia, ha confirmado oficialmente la inversión de su compañía en xAI, la startup de inteligencia artificial de Elon Musk. Además, ha proporcionado más detalles sobre el ambicioso acuerdo de Nvidia con OpenAI, subrayando el papel central que su empresa desempeñará en la construcción de la infraestructura de IA del futuro.
Inversión en xAI y la admiración por Elon Musk
Según informó Bloomberg ayer, Nvidia invertirá 2 mil millones de dólares en xAI de Elon Musk. Esta inversión se destinará a financiar la GPU de la supercomputadora Colossus 2 de xAI, a través de una combinación de deuda y capital.
En una entrevista con CNBC, Jensen Huang confirmó la inversión y, de manera reveladora, expresó que su «único arrepentimiento» es no haberle dado más dinero a xAI. Huang no ocultó su admiración por Musk, afirmando que «siempre buscamos startups en las que valga la pena invertir» y admitiendo que «quiere participar en todos los campos en los que participa Elon». Este entusiasmo destaca la fe de Nvidia no solo en xAI, sino en el ecosistema de innovación que Musk está construyendo.
Asociación directa con OpenAI para una infraestructura masiva
Huang también habló sobre el nuevo acuerdo de Nvidia con OpenAI, destacando que es la primera vez que las dos partes establecen una «asociación directa». Este es un cambio significativo, ya que, como explicó Huang, «normalmente, los proveedores de servicios en la nube nos compran y luego OpenAI los alquila a través del servicio en la nube. Pero esta será una alianza directa».
Nvidia ya había anunciado en septiembre su intención de invertir hasta 100 mil millones de dólares en OpenAI para construir una infraestructura de centro de datos de IA. Ambas partes han afirmado que los sistemas de Nvidia que OpenAI planea implementar requerirán aproximadamente 10 gigavatios de infraestructura, lo que Jensen Huang ha equiparado a aproximadamente entre 4 y 5 millones de GPU.
Respecto a OpenAI, Huang dijo que el acuerdo ayudará a la startup a prepararse para convertirse en un «operador de centro de datos de hiperescala autoalojado». Sorprendentemente, admitió no haber estado al tanto del acuerdo de OpenAI con AMD antes de que se anunciara públicamente.
Huang también lamentó no haber invertido antes en OpenAI, señalando que sus ingresos están creciendo exponencialmente. Aclaró que la inversión de Nvidia en OpenAI no requirió que la startup utilizara el dinero específicamente para adquirir tecnología de Nvidia.
Cuando se le preguntó cómo OpenAI financiaría un acuerdo de esta magnitud, Huang respondió que OpenAI «todavía no tiene dinero» y que recaudaría los fondos necesarios a través de ingresos y financiación de capital o deuda.
Finalmente, Huang destacó las colaboraciones previas de Nvidia con empresas como Oracle y CoreWeave, indicando: «Les ayudaremos a construir su propia infraestructura de IA, sentando las bases para su desarrollo independiente de computación en la nube durante los próximos cinco años». Esto subraya el papel estratégico de Nvidia como proveedor clave de la infraestructura que sustenta la revolución de la IA.
El veredicto del Gurú: Nvidia, el arquitecto silencioso de la revolución de la IA
La confirmación de Jensen Huang sobre la inversión de Nvidia en xAI de Elon Musk y la profundización de su alianza con OpenAI reafirman la posición de Nvidia como el arquitecto silencioso y, a la vez, el motor principal de la revolución de la inteligencia artificial. La suma de 2 mil millones de dólares para xAI y la ambición de construir una infraestructura de 10 gigavatios (4-5 millones de GPUs) para OpenAI no son meras transacciones; son movimientos estratégicos que cimentan el dominio de Nvidia en el hardware de IA.
La admiración de Huang por Musk y su deseo de «participar en todos los campos en los que participa Elon» no es solo una declaración personal, sino un reconocimiento inteligente del vasto ecosistema de innovación que Musk está cultivando, desde los coches eléctricos hasta la exploración espacial y, ahora, la IA.
La «asociación directa» con OpenAI es un giro fascinante. Al pasar de un modelo de alquiler a través de la nube a una compra directa de infraestructura, OpenAI busca una mayor autonomía y optimización, y Nvidia es el socio indispensable para hacerlo posible. Esto posiciona a Nvidia más allá de ser un simple proveedor de chips; se convierte en un habilitador y co-arquitecto de los futuros gigantes de la IA. El comentario de Huang sobre que OpenAI «todavía no tiene dinero» pero que lo recaudará, es un testimonio de la confianza que el mercado tiene en el potencial de estas startups de IA y en la capacidad de Nvidia para impulsarlas.
En un momento donde la carrera por la supremacía en IA se intensifica, Nvidia no solo vende las «palas» de la fiebre del oro, sino que también está invirtiendo activamente en los «mineros» más prometedores. Esto no solo asegura su liderazgo en el hardware, sino que también le otorga una influencia estratégica sin igual en la dirección futura de la inteligencia artificial. Nvidia es, sin duda, el cerebro detrás del cerebro de la IA.
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