La historia de Apple en la última década se puede resumir en una frase: la guerra contra los botones. Mataron el teclado físico del iPhone, mataron el botón de inicio, y si pudieran, probablemente matarían el botón de encendido. Es una obsesión por el minimalismo y la interacción gestual. Y su próxima víctima ya está en el punto de mira.
Según una nueva y fascinante filtración, los próximos AirPods Pro 3 llevarán esta filosofía a un nuevo y arriesgado extremo. El estuche de carga no solo perderá su tradicional y discreto botón de emparejamiento trasero, sino que ganará una nueva área de control táctil en la parte frontal. Tu estuche de los AirPods está a punto de convertirse en una especie de iPod del siglo XXI.
Un iPod en tu bolsillo: así funcionaría
La idea, que llega de medios extranjeros, es tan simple como revolucionaria. Podrás realizar gestos directamente sobre la superficie del estuche para controlar la reproducción sin tener que tocar ni los auriculares ni el iPhone. Se habla de poder deslizar para cambiar de canción, tocar para pausar la música y ajustar el volumen.
Es la solución perfecta para esos momentos en los que llevas los auriculares puestos pero tienes el estuche en la mano al caminar, o para cuando quieres hacer un ajuste rápido sin tener que aprenderte la compleja combinación de toques y pellizcos en los propios bastones de los AirPods. Es llevar la interacción a un nuevo nivel de conveniencia.
El riesgo: la pesadilla de los toques accidentales
Pero esta genialidad viene con un riesgo enorme, uno que todos los que hemos usado unos AirPods conocemos muy bien: los toques fantasma. ¿Cuántas veces has pausado sin querer una canción al recolocarte un auricular? Ahora imagina esa misma sensibilidad en un estuche que llevas rozando en el bolsillo de tus vaqueros.
El éxito o el fracaso de esta función dependerá al 100% de la inteligencia del software de Apple para distinguir entre un gesto intencionado y un roce accidental. Si lo hacen bien, será una revolución en la usabilidad. Si lo hacen mal, será una fuente de frustración infinita.
Una actualización de madurez
Esta posible nueva función, sumada al ya rumoreado sensor de ritmo cardíaco en los propios auriculares, perfila a los AirPods Pro 3 como una actualización de madurez. Apple no se está conformando con mejorar el sonido; están redefiniendo la interacción y la utilidad de su ecosistema de audio. El diseño de los propios auriculares, según las filtraciones, se mantendrá sin cambios. Pero el estuche, ese pequeño y olvidado ladrillo de plástico blanco, podría convertirse en el protagonista inesperado de la próxima generación.
¿Qué te parece la idea de un estuche táctil? ¿Una genialidad de la usabilidad o una futura pesadilla? El debate sobre el futuro de las interfaces está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.