El lanzamiento del nuevo MacBook Pro M4 Pro ha causado un notable revuelo entre los entusiastas de la tecnología y los profesionales que dependen de herramientas informáticas avanzadas. Aunque a primera vista esta actualización puede parecer sutil, es importante señalar que MacBook Pro M4 Pro establece un nuevo estándar en el ámbito de la computación portátil, reafirmando el compromiso de Apple con la innovación y la excelencia. Esta versión mejora un dispositivo que ya había sido elogiado, lo que puede llevar a preguntarse si realmente es necesario considerar esta actualización.
La integración del chip M4 Pro distingue a este modelo del anterior, no solo por su rendimiento, sino también por su eficiencia energética. Los usuarios se beneficiarán de una potencia de procesamiento superior, lo que permite ejecutar aplicaciones complejas y multitarea sin esfuerzo. Además, la optimización del rendimiento gráfico aporta una ventaja significativa para aquellos que trabajan en diseño, edición de video o desarrollo de software. Estas mejoras en el hardware son significativas, a pesar de que las características visuales externas permanezcan similares, lo que representa un avance notable en la categoría de laptops profesionales.
Asimismo, la nueva MacBook Pro M4 Pro también ha sido equipada con un sistema de refrigeración mejorado, lo que minimiza el sobrecalentamiento durante largas sesiones de uso. Esto es particularmente relevante para los usuarios que requieren un rendimiento constante durante la manipulación de proyectos pesados. La duración de la batería también ha sido optimizada, asegurando que los profesionales pueden trabajar sin interrupciones. En definitiva, aunque las novedades introducidas en el MacBook Pro M4 Pro son limitadas, su impacto en la experiencia del usuario es considerable, lo que permite que este dispositivo se mantenga a la vanguardia de la tecnología profesional.
Mejoras en hardware y rendimiento
El nuevo MacBook Pro M4 Pro marca un avance significativo en cuanto a rendimiento y eficiencia, gracias a la introducción de su innovador chip M4. Este procesador, en sus variantes M4 Pro y M4 Max, está diseñado para ofrecer una capacidad de procesamiento superior, ideal para profesionales que requieren un alto rendimiento en tareas intensivas como edición de video, modelado 3D y desarrollo de software. Apple afirma que con el M4 Pro, el nuevo MacBook Pro ofrece un 75% más de ancho de banda de memoria que la generación anterior y es hasta tres veces más rápido que los modelos con el chip M1 Pro.
La arquitectura de este chip permite una mejor gestión energética, lo que se traduce en un aumento de la duración de la batería (ofrece la mayor autonomía que ha tenido nunca un Mac, hasta 24 horas para el modelo de 16 pulgadas), permitiendo a los usuarios trabajar por más tiempo sin necesidad de recargar. Y es compatible con la carga rápida, de manera que puede cargarse un 50 % en solo 30 minutos. Todos los modelos rinden igual estén o no conectados a la corriente, así que tú deja de preocuparte por los cables y céntrate de lleno en tu universo.
Una de las características más destacadas del nuevo MacBook Pro es su memoria unificada, que no sólo mejora la velocidad de acceso a los datos, sino que también ofrece un aumento en la eficiencia general al optimizar el uso de memoria entre el CPU y el GPU. La posibilidad de disfrutar de hasta 96 GB de memoria unificada en la versión M4 Max es particularmente atractiva para profesionales que manipulan grandes volúmenes de información y requieren un sistema que pueda mantener la fluidez en la ejecución de múltiples tareas simultáneamente.
También estrenan los nuevos puertos Thunderbolt 5, con tres entradas que soportan velocidades de hasta 120 Gb/s gracias a su tecnología Bandwidth Boost, que triplica la capacidad de ancho de banda de Thunderbolt 4. Además, el nuevo estándar del que hablamos es compatible con USB 4, y soporta protocolos avanzados como PCIe 4.0, lo que se traduce en un acceso más rápido a dispositivos de almacenamiento y periféricos. Esta mejora es crucial para quienes dependen de periféricos avanzados, como monitores externos o sistemas de almacenamiento rápido. Los usuarios creativos y los desarrolladores serán los principales beneficiarios de estas características, optimizando su flujo de trabajo y aumentando su productividad. La clara diferenciación entre el M4, M4 Pro y M4 Max permite a los usuarios elegir el modelo que mejor se adapta a sus necesidades específicas, haciendo del nuevo MacBook Pro una herramienta realmente versátil y potente en el ámbito profesional.
Innovaciones en la pantalla y la cámara
El nuevo MacBook Pro M4 Pro ha elevado notablemente su calidad visual y funcionalidad, comenzando con la incorporación de la avanzada pantalla nanotexturizada. Esta tecnología permite reducir los reflejos y mejorar la visibilidad bajo diversas condiciones de luz, lo que resulta en una experiencia visual más clara y nítida. Junto a esta innovación, el dispositivo cuenta con una pantalla Liquid Retina XDR que proporciona colores vibrantes y un rango dinámico excepcional, convirtiendo cualquier tarea visual, ya sea editar fotos o ver películas, en una experiencia gratificante.
La pantalla Liquid Retina XDR no solo ofrece una resolución impresionante, sino que también incluye tecnología ProMotion, que permite tasas de refresco de hasta 120Hz. Esto representa un salto significativo sobre versiones anteriores, ya que las animaciones se ven más fluidas y los desplazamientos en pantalla son más responsivos. Esta característica es especialmente útil para profesionales que requieren un alto nivel de precisión en sus visuales y un rendimiento constante en tiempo real.
La sensacional pantalla con 1.600 nits de pico de brillo HDR ahora ofrece hasta 1.000 nits de brillo para contenido SDR, por eso todo se ve de maravilla incluso a pleno sol. Además, el brillo baja hasta 1 nit en entornos oscuros, para que tus ojos no trabajen de más aunque te pille la noche delante del ordenador.
Además, el nuevo MacBook Pro M4 Pro está equipado con una cámara frontal de 12 Megapíxeles, frente a la cámara de 1080p del MacBook Pro M3, lo que proporciona una mejora sustancial en las videoconferencias y grabaciones. La cámara logra capturar imágenes con gran claridad, incluso en condiciones de poca luz, lo que es esencial en el mundo laboral actual, donde las reuniones virtuales son comunes. La compatibilidad con Center Stage significa que te mantendrás centrado en el encuadre aunque te muevas durante las videollamadas, lo que puede resultar muy útil al hacer presentaciones. Las funcionalidades avanzadas de la cámara, junto con el potente sistema de procesamiento del M4 Pro, garantizan que cada detalle se reproduzca con fidelidad. Si a eso le sumas los micros y los altavoces avanzados, serás la estrella de todas las videollamadas.
Considerando la opción de pantalla nanotexturizada, es importante reflexionar sobre su coste frente a los beneficios que aporta en términos de rendimiento. Si bien representa una inversión adicional, los usuarios que valoran la calidad visual definitivamente pueden encontrar justificación en esta mejora. Con ello, el MacBook Pro M4 Pro no solo ofrece herramientas de trabajo potentes, sino también un disfrute visual sin igual.
Precios y disponibilidad
Los nuevos MacBook Pro M4 ya se pueden comprar. Mantienen los colores icónicos de negro espacial y plata. A continuación os dejamos algunos de los precios de los modelos disponibles.
14 pulgadas
- MacBook Pro M4 con 10 núcleos CPU, 10 núcleos de GPU, 16 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento: 1929 €.
- MacBook Pro M4 Pro con 12 núcleos CPU, 16 núcleos de GPU, 24 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento: 2449 €.
- MacBook Pro M4 Max con 14 núcleos CPU, 32 núcleos de GPU, 36 GB de RAM y 1 TB de almacenamiento: 3849 €.
16 pulgadas
- MacBook Pro M4 Pro con 14 núcleos CPU, 20 núcleos de GPU, 24 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento: 2949 €.
- MacBook Pro M4 Max con 14 núcleos CPU, 32 núcleos de GPU, 36 GB de RAM y 1 TB de almacenamiento: 4149 €.
Conclusiones y recomendaciones finales
Tiene un equilibrio maravilloso entre potencia, autonomía de la batería y estetica. Al comparar este modelo con otros portátiles de la competencia, incluyendo su propio hermano, el MacBook Air, se evidencia que el M4 Pro está diseñado especialmente para profesionales y creadores que requieren mayor potencia y eficiencia en sus tareas diarias. Su superioridad en términos de procesamiento gráfico y velocidad, junto con la duración de la batería robusta, lo posiciona como una herramienta preferida para quienes realizan trabajos intensivos en software, como edición de video, desarrollo de software y modelado 3D.
Para aquellos usuarios que buscan un equipo versátil pero menos exigente, el MacBook Air podría ser la opción más equilibrada. Este modelo es ideal para estudiantes y profesionales que necesitan un dispositivo ligero para tareas de productividad, navegación en línea y aplicaciones de oficina. En consecuencia, la elección entre un MacBook Pro M4 Pro y un MacBook Air depende en gran medida del tipo de trabajo que el usuario realice, así como de su presupuesto.
Sin embargo, es fundamental señalar algunas áreas de mejora para futuras versiones del MacBook Pro. La inclusión de un sistema de Face ID podría ofrecer una mayor comodidad y seguridad para los usuarios, facilitando el acceso al dispositivo. Además, un rediseño que permita un perfil más delgado y ligero sería beneficioso, manteniendo la resistencia y la durabilidad que se espera de productos de Apple. Con estos ajustes, el MacBook Pro M4 Pro podría consolidar aún más su posición como el líder en su categoría.
¿Qué le falta? Sin duda, la posibilidad de colocarle una tarjeta SIM (aunque sea virtual) para poder conectarse con él a Internet en cualquier parte sin hacer uso de nuestro móvil cuando estemos en cualquier lugar sin conexión WiFi. ¿Esto llegará cuando Apple desarrolle su propia antena/módem 5G? Esperemos que sí, porque sería otro puntazo para Apple.
En conclusión, el nuevo MacBook Pro M4 Pro es una opción sólida para aquellos que necesitan potencia y versatilidad en sus tareas diarias, aunque también debe considerarse el contexto y las necesidades específicas del usuario al elegir un equipo adecuado.