
En el reciente OpenAI DevDay, la conferencia para desarrolladores de OpenAI, se produjo un encuentro de titanes tecnológicos que ha generado un gran revuelo: Sam Altman, CEO de OpenAI, y Jony Ive, el legendario ex diseñador jefe de Apple, conversaron sobre el futuro de la inteligencia artificial y su interacción con el hardware.
Una visión más allá del smartphone
Según Business Insider, Ive le comentó a Altman que tiene entre 15 y 20 ideas para la familia de dispositivos de IA de OpenAI, enfatizando que estos probablemente serán completamente diferentes del iPhone. Aunque Ive se hizo famoso por diseñar dispositivos icónicos como el iPhone, no dudó en criticar a los smartphones y las tabletas durante la conversación, expresando su deseo de que los nuevos dispositivos de IA hagan a la gente más feliz y menos ansiosa.
«Cuando digo que tenemos una relación disfuncional con la tecnología, me quedo corto«, afirmó Ive. «No solo podemos corregirla, sino que podemos cambiar radicalmente la situación en la que nos encontramos. No tenemos por qué aceptar esto como la norma«.
A principios de este año, OpenAI adquirió la startup de hardware de Ive por más de 6 mil millones de dólares, lo que desató especulaciones sobre los dispositivos de IA que el exdiseñador de Apple estaba desarrollando. Altman ya había expresado previamente la idea de desarrollar un compañero de IA y una familia completa de dispositivos, y la combinación de OpenAI y la destreza de diseño de Ive podría representar una amenaza potencial para Apple, que, a pesar de dominar la era móvil, se ha rezagado en IA generativa.

Ive comentó que el rápido desarrollo actual de la tecnología de IA le ha dificultado a él y a su equipo de diseño concentrarse. «Este impulso nos ha llevado a tener entre 15 y 20 ideas de productos muy atractivas. El reto es concentrarse. Si sabes que solo tienes tres buenas ideas, sería mucho más fácil. Pero no es así. Estamos diseñando una gama completa de productos. Nos aseguramos de ser cuidadosos y reflexivos al elegir nuestro enfoque, sin distraernos con otras cosas», explicó.
Altman preguntó a Ive cómo abordaron el diseño en torno a esta nueva filosofía. Ive respondió: «Amamos a la humanidad y queremos que nuestros productos sean útiles». Admitió creer firmemente en el potencial de la IA, afirmando: «En toda mi carrera, nunca me he encontrado con una oportunidad tecnológica comparable al potencial que la IA está mostrando actualmente».
¿Qué es el nuevo dispositivo? Simplicidad y resolución de problemas
Ive reveló que espera que los nuevos dispositivos de IA sean divertidos de usar y, al mismo tiempo, resuelvan algunos de los problemas que los teléfonos inteligentes y las tabletas han traído durante la última década o incluso dos.
«Las consecuencias y el impacto de ser desconsiderados y descuidados son realmente inimaginables», dijo. «En cuanto a las interfaces que diseñamos, si no hacen sonreír a la gente y, en cambio, se convierten en una forma más de estereotipos y exclusión, creo que sería un gran perjuicio para todos«.
Esto podría ser otra ironía para Apple, ya que la marca siempre ha tomado el diseño de dispositivos muy en serio y se ha esforzado por lograr un posicionamiento de alta gama y exclusividad.
Ive también proporcionó al menos dos pistas sobre la naturaleza de estos dispositivos. «Estamos realizando una investigación exhaustiva para intentar comprender la interacción entre las personas. Esa interacción es muy compleja y llena de matices. Nuestra forma de pensar está profundamente entrelazada con otros dispositivos y herramientas«.

Aunque aparentemente criticaba a Apple, tomó prestada una famosa cita de Steve Jobs, argumentando que estos nuevos dispositivos de IA deberían ser «simples y fáciles de usar». «Debería parecer inevitable y obvio, como si no existiera otra solución razonable. Cuando la gente vea el resultado final, dirán: ‘Bueno, sí, claro que así es como debe hacerse. ¿Por qué tardaron tanto?'», dijo Ive.
Dificultades técnicas en el desarrollo
Sin embargo, el Financial Times también informó que OpenAI e Ive están trabajando en una serie de problemas técnicos surgidos durante el desarrollo de un nuevo y misterioso dispositivo de IA. Su objetivo es crear un dispositivo portátil sin pantalla que pueda percibir la información visual y sonora del entorno y responder a las solicitudes del usuario.
Personas familiarizadas con el asunto dijeron que OpenAI e Ive aún no han resuelto algunos problemas clave, lo que podría retrasar el lanzamiento del dispositivo. Aunque el equipo de Ive ha completado el desarrollo del hardware, aún enfrenta obstáculos en el sistema de software y la arquitectura subyacente necesaria para su funcionamiento. Estos incluyen determinar la «personalidad» del asistente de IA, abordar las cuestiones de privacidad y presupuestar la potencia de procesamiento necesaria para ejecutar los modelos de OpenAI en dispositivos de consumo masivo.
Una persona cercana a Ive comentó: «La potencia de procesamiento es otro factor importante que ha provocado el retraso. Amazon tiene suficiente potencia de procesamiento para Alexa, y Google tiene potencia de procesamiento para sus dispositivos Home, pero OpenAI tiene dificultades para proporcionar suficiente potencia de procesamiento para ChatGPT, y mucho menos para los dispositivos de IA. Primero deben resolver este problema«.
No obstante, una persona cercana a OpenAI dijo que estos problemas iniciales son simplemente una parte normal del desarrollo del producto. OpenAI e Ive están trabajando en un dispositivo del tamaño aproximado de un smartphone, según varias personas familiarizadas con el tema. Los usuarios interactuarían con él mediante una cámara, un micrófono y un altavoz. Una de las personas comentó que el dispositivo podría tener varias cámaras.
El veredicto del Gurú: La IA hardware: ¿La próxima gran revolución o un desafío monumental?
La colaboración entre Jony Ive y Sam Altman para desarrollar hardware de IA en OpenAI es, sin duda, una de las noticias tecnológicas más fascinantes y potencialmente disruptivas del año. El hecho de que Ive tenga entre 15 y 20 ideas de dispositivos que se alejan radicalmente del paradigma del iPhone, el dispositivo que lo catapultó a la fama, es una declaración de intenciones poderosa. Es una crítica implícita, y a veces explícita, a la «relación disfuncional con la tecnología» que los smartphones han creado.
La visión de Ive de un hardware de IA que haga a la gente «más feliz y menos ansiosa», que sea «simple y fácil de usar» como los productos de Jobs, pero sin las complejidades y distracciones de las pantallas actuales, es profundamente atractiva. Un dispositivo portátil sin pantalla que perciba el entorno y responda de manera natural podría redefinir nuestra interacción diaria con la tecnología, alejándonos de la adicción a la pantalla y acercándonos a un asistente verdaderamente integrado en la vida.
Sin embargo, el camino no está exento de desafíos monumentales. El Financial Times señala problemas técnicos críticos: la «personalidad» del asistente de IA, la privacidad (crucial para un dispositivo que «percibe» el entorno) y, fundamentalmente, la potencia de procesamiento. Ejecutar los complejos modelos de OpenAI en un dispositivo de consumo masivo, con limitaciones de batería y coste, es una proeza de ingeniería. Si OpenAI ya tiene dificultades para gestionar la potencia para ChatGPT, escalar esto a miles o millones de dispositivos portátiles es un obstáculo enorme.
La ironía de que Ive use la filosofía de Jobs para criticar los productos que él mismo ayudó a crear es un guiño a la constante evolución y, a veces, a la necesidad de una reinvención radical. Esta iniciativa no solo pone presión sobre Apple para innovar en IA, sino que también nos invita a imaginar un futuro donde la tecnología sea más una extensión natural de nosotros mismos y menos una distracción constante. Este proyecto, si logra superar sus dificultades técnicas, podría ser la próxima gran revolución, o un recordatorio de los límites actuales de la IA en el hardware de consumo.
¿Qué opinas de la visión de Jony Ive para el hardware de IA de OpenAI? ¿Crees que un dispositivo sin pantalla puede ser la próxima gran revolución, o los desafíos técnicos serán demasiado grandes? El debate está servido. Déjanos tu opinión en los comentarios y únete a la discusión en Instagram, Facebook y YouTube.