La PS4 tiene un número de ventas arrollador e indiscutible, pero Xbox One le sigue la estela, y en algunos países como Gran Bretaña, ocupa la primera posición en ventas en consolas de última generación.
Según informa MCV, la consola de Microsoft habría sido la más vendida en las tiendas del país durante cuatro semanas seguidas.
Los motivos que se apuntan son diversos: reducción de 30 libras esterlinas en el precio final de la consola, al lanzamiento de Titanfall y a los problemas de suministro de la PS4 (que no está logrando satisfacer la demanda británica).
La última vez que Microsoft anunció cifras oficiales de ventas fue el pasado mes de enero. Xbox One había vendido hasta entonces más de 3,9 millones de consolas. Hoy en día, la consola americana se vende en menos países que la consola japonesa, por lo que es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre la batalla que están librando ambas consolas.
La respuesta sigue siendo elevada por parte de los consumidores, y cualquier movimiento en el mercado por parte de una de las dos empresas, puede decantar la balanza en uno u otro sentido.