DJI acaba de presentar el RS 3 Mini, un nuevo estabilizador de cámaras ultracompacto y práctico para viajar. Con solo 795 gramos de peso, RS 3 Mini es fácil de sujetar para poder grabar durante mucho tiempo.
Se puede llegar a usar con una sola mano de manera relativamente cómoda. Y, una vez plegado, apenas ocupa espacio en cualquier mochila de transporte.
Con potentes motores de mucho torque, el estabilizador de cámaras RS 3 Mini tiene una capacidad de carga de hasta 2 kg, lo que permite una amplia gama de combinaciones de cámaras y objetivos.
Cuenta con el algoritmo de estabilización de tercera generación de la marca, el cual promete resultados excepcionales incluso en situaciones complejas –como los ángulos bajos–. También ofrece la posibilidad de grabar vídeo en vertical de forma nativa, algo sumamente agradecido considerando la creciente popularidad del formato.
El compacto estabilizador de cámaras incorpora una pantalla táctil a todo color de 1,4 pulgadas que muestra un nuevo e intuitivo diseño de la interfaz de usuario para acceder fácilmente a los ajustes de uso habitual.
El producto se puede conectar por cable o Bluetooth siempre que la cámara sea compatible. Si es el caso, esta conexión permite accionar el obturador desde el propio estabilizador o incluso controlar el zoom de la cámara –si el objetivo lo permite– con la rueda deslizante situada en la empuñadura. En el lateral, además, tiene un puerto NATO para accesorios.
Sobre la autonomía DJI promete hasta 10 horas de funcionamiento con su batería integrada, que tarda 2,5 horas en cargarse por completo.
El DJI RS 3 Mini ya se puede adquirir por un precio de venta recomendado de 389 euros.